Enrique Quintana: El adiós de Tatiana y la competitividad

Era de las personas sensatas dentro del grupo de colaboradores del presidente
Era de las personas sensatas dentro del grupo de colaboradores del presidente
Tatiana Clouthier.Era de las personas sensatas dentro del grupo de colaboradores del presidente
autor
Enrique Quintana
Director General Editorial de El Financiero.
2022-10-07 |07:11 Hrs.Actualización07:11 Hrs.


Lo que nos faltaba. A unas semanas de haber planteado una nueva política industrial; en medio de las consultas en el marco del TMEC y con el anuncio reciente de la apertura de sectores en el marco del programa antiinflacionario, se va la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier.

La grosera negación del abrazo por parte del presidente de la República da cuenta de las diferencias entre ella y la Presidencia, al margen de cuáles sean.

La coyuntura es muy inoportuna, pero además de las circunstancias del momento, están quedando sin resolverse los problemas estructurales que han aquejado a la economía de México desde hace años.

Y, además, veremos qué sucede en la mañanera de hoy, si es que en ella se anuncia la persona que se quedará a cargo.

Pero algunos nombramientos recientes no permiten augurar nada bueno. Ojalá me equivoque.

Uno de los factores estructurales que han afectado y afectarán a México es el deterioro de su competitividad.

Una de las instituciones más prestigiadas del mundo en la elaboración de ranking de competitividad es el Institute for Management Development (IMD), de Suiza.

En el reporte correspondiente a 2022, en una lista de 63 naciones que fueron analizadas, México aparece en el lugar 55.

Es la misma posición que tuvo en el año 2021 y retrocedió cinco lugares respecto al lugar 50 que tenía en el año 2019.

Como en casi todos estos análisis, hay fortalezas y debilidades para la competitividad mexicana.

Por ejemplo, cuando se califica el nivel de empleo, de acuerdo con los parámetros utilizados, México aparece en una muy buena posición, el lugar número cinco, debido a la baja tasa de desempleo que existe en el país.

Pero, en el otro extremo, está, por ejemplo, el factor educación, en el cual México aparece en la posición 62 de 63 países.

Otro de los rubros en los cuales hay un enorme rezago, es en la legislación respecto a los negocios. Esto quiere decir que existe una gran cantidad de obstáculos legales y normativos para que funcionen los negocios en nuestro país.

En la metodología que emplea el IMD se hacen encuestas entre los hombres de negocios a nivel global. En ellas se detecta, por ejemplo, que la existencia de fuerza laboral calificada es uno de los atractivos que hay en nuestro país.

Otro de los factores que también es positivo es el nivel de costos que existe en México.

En el otro extremo, entre algunos de los factores que pesan negativamente se encuentra la competencia del gobierno.

Los hombres de negocios encuentran funcionarios que tienen un nivel relativamente bajo para atender asuntos públicos.

Otro ingrediente es la falta de cultura en materia de investigación y desarrollo tecnológico. Pocas empresas y escasas instituciones se dedican a esta tarea.

No es sorpresa que otro de los factores negativos sea un ambiente legal que muchas empresas consideran incierto y poco efectivo.

Para visualizar la posición de México en este listado es interesante observar que Perú se encuentra ligeramente adelante de nuestro país, en el lugar 54, mientras que Colombia está en el lugar 57, Brasil en el 59 y Argentina en el 62.

México está muy lejos de los niveles de los líderes en competitividad, los cuales son encabezados por Dinamarca en la posición número uno, luego siguen Suiza, Singapur, Suecia y Hong Kong.

Como en otras ocasiones le he comentado en este espacio, si con todas estas deficiencias México es un destino que sigue siendo atractivo para la inversión extranjera, es prácticamente inimaginable lo que podría estar sucediendo si tuviéramos realmente condiciones que nos permitieran estar con niveles de productividad más elevados que los que tenemos.

Insisto en que ojalá me equivoque, pero me parece que Tatiana Clouthier era de las personas sensatas dentro del grupo de colaboradores del presidente.

Ojalá su salida no signifique que lo empresarios queden aún más desamparados de lo que ya están.