Enrique Quintana: La increíble fortaleza del peso

Habría dos razones, una económica y la otra política para que la moneda mantenga ritmo
Habría dos razones, una económica y la otra política para que la moneda mantenga ritmo
'Superpeso' sigue impecable.Habría dos razones, una económica y la otra política para que la moneda mantenga ritmo
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Enrique Quintana
Director General Editorial de El Financiero.
2023-03-02 |07:04 Hrs.Actualización07:04 Hrs.

Ayer, por algunos minutos, el dólar llegó a cotizarse a 18.06 pesos por dólar. Un nivel que se veía prácticamente inalcanzable hasta hace unas cuantas semanas.

Apenas hace seis meses, la cotización estaba en 20.20 pesos. Con el cierre del día de ayer, la revaluación del peso frente al dólar fue ya superior al 10%.

Para encontrar cotizaciones equivalentes hay que remontarse al mes de abril del 2018.

¿Por qué razón nuestra moneda se ha apreciado de esta manera?

Uno de los factores es el debilitamiento general del dólar a partir de septiembre. Hay una pérdida de alrededor de 5% en la moneda norteamericana frente a una canasta de monedas en el mundo. 

Pero, hay otros dos factores relevantes.

El primero es la política monetaria del Banxico, que ayer mismo, en la presentación de su Informe Trimestral, ratificó su vocación de seguir con tasas que permitan controlar la inflación, con un pronóstico menos optimista que hace tres meses.

El segundo es la perspectiva que ayer ilustró Tesla

La empresa tiene muchos frentes de desarrollo, pero su nueva factoría en Monterrey es para México algo muy relevante. 

El evento con bombos y platillos va a ser la colocación de la primera piedra de la planta en los próximos meses. No hubo detalles de su proyecto, pero lo más importante es que se da como una realidad, y para lo que significa Tesla en el mundo, es un emblema. 

Con la decisión anunciada por Elon Musk, muchas empresas van a voltear hacia México. Si el hombre más rico del mundo, con una de las empresas más valiosas de la Bolsa está invirtiendo en México, es lógico preguntarse qué tiene ese país para atraer a estos inversionistas.

Tanto del lado del gobierno mexicano como del de Musk se sabía del muy poderoso efecto simbólico de la inversión de Tesla. Por eso llegaron a un acuerdo. Hay algunos funcionarios de esta administración federal que saben muy bien con lo que están lidiando. Creo que básicamente son dos: Marcelo Ebrard y Rogelio Ramírez de la O.

Obviamente, a distancia, Alfonso Romo, ahora ya solo asesor, le entiende perfectamente al tema. Estamos hoy en otro momento del ‘nearshoring’

Hace algunos días cuestionábamos por qué no se ha reflejado este proceso en los flujos de inversión extranjera directa o en la cuota de mercado que México tiene en Estados Unidos. Son cuestionamientos muy legítimos, pero que tienen que ver con el pasado.

Antes de Tesla, los parques industriales del norte del país ya estaban saturados; en el Bajío y en Jalisco empezaban a llenarse.Con los efectos indirectos de la decisión de Musk va a haber una crisis de espacio y una burbuja inmobiliaria en los terrenos industriales (de hecho ya la hay en algunos lugares).Va a haber una escasez dramática de mano de obra calificada y un encarecimiento enorme.

Los problemas de abasto de energía van a crecer y la escasez de agua va a presentarse en más puntos. Como dicen los norteamericanos: ¡happy problems! Se trata de las múltiples dificultades derivadas de un crecimiento acelerado. No son triviales. Son muy serias y requieren atención dedicada, recursos y coordinación de políticas públicas con decisiones privadas. Si no se resuelven, el flujo potencial de inversión extranjera se puede caer drásticamente.

Para variar, buena parte de la chamba le va a caer al ‘bombero’ Marcelo Ebrard. El problema es que él seguramente va a estar en el gabinete solo por algunos meses más. Su aspiración para contender por la candidatura de Morena lo va a sacar del puesto.

El tema es que, si no es él, no se ve quién pueda operar la creación de las condiciones para la llegada de grandes volúmenes de inversión foránea. Me parece que el potencial del nearshoring lo vamos a ver realmente hasta el 2024 y el 2025

Tal vez por eso no le entusiasma demasiado a AMLO. Ya no podrá cortar el listón de decenas de fábricas que van a inaugurarse. Y ni pensarlo de la de Tesla… aunque tal vez le organicen algo para que no se frustre.