Enrique Quintana: Tal vez me equivoque

Probablemente el coronavirus ya nos acompañé en los viajes que hacemos en el transporte público
Probablemente el coronavirus ya nos acompañé en los viajes que hacemos en el transporte público
Compañía.Probablemente el coronavirus ya nos acompañé en los viajes que hacemos en el transporte público
Cuartoscuro
autor
Enrique Quintana
Director General Editorial de El Financiero.
2020-03-12 |06:39 Hrs.Actualización06:39 Hrs.

Hasta dónde yo sé… pero tal vez me equivoque, los mexicanos no somos genéticamente diferentes a los habitantes de otros países.

Creo que tampoco somos un país que tenga las fronteras selladas o que seamos afectos a quedarnos resguardados en nuestra casita… pero quizás me equivoque.

Más bien creo que hay cientos de miles de cruces diarios en nuestras fronteras, sobre todo en la del norte… pero tal vez me equivoque.

Creo que nos encantan las fiestas, las marchas… y también el futbol… pero quizás me equivoque.

Cuando no choca, nos subimos al Metro en la Ciudad de México por millones y viajamos como sardinas… pero tal vez me equivoque.

Tal vez, por todo lo anterior, el virus denominado Covid-19, ya viaja en avión, en Metro y en microbús. Nos acompaña en las marchas y está con la afición de los estadios. Cruza las fronteras y se divierte en nuestras fiestas… pero tal vez me equivoque.

Sí, lo más probable es que yo tenga una imagen totalmente errónea de la realidad porque apenas tenemos 11 casos confirmados.

Muchos nos preguntamos, si la razón de que tengamos tan pocos casos es porque apenas hay 49 casos sospechosos y 264 descartados, lo que implicaría que se han hecho 325 pruebas. En un país de cerca de 130 millones de habitantes y decenas de millones de turistas al año, parecen pocos… pero tal vez me equivoque.

Yo sé que el personal médico que le está haciendo frente a este problema es calificado. Tienen conocimientos y experiencia.

Pero también sé que, si la orden “desde arriba” es no causar el pánico, no hay quien tenga la fuerza política para desobedecer las órdenes y denunciar.

Quizás el hecho de que el mundo se confronte con la pandemia nos envíe el mensaje de que nosotros también debemos hacerlo… pero tal vez me equivoque.

Quizás el virus sea inteligente y sepa que si prolifera en México va a ser un sabotaje a la 4T, por lo que no lo haría. En una de esas, solo contagia a los neoliberales y a los fifís.

Pero, ¿qué tal si no?

¿Y si se comportara como cualquier otro virus y ya estuviera circulando por cientos o millares de personas en México en este momento?

Lograr reportar pocos casos de coronavirus es bien sencillo. Basta con hacer pocas pruebas. Y eso se logra poniendo muchos candados para realizarse las pruebas efectuadas por la medicina pública.

Y cobrando caras aquellas que realiza la medicina privada.

El problema es que esa estrategia es la típica negación de la realidad.

Es la 4T, diciendo que a ellos no les puede pasar esto.

Que fueron muchos años de lucha y un gran respaldo de la gente, para que un miserable paquete de proteína, que ni a ser vivo llega, tire por la borda todo ese esfuerzo, causando una crisis económica.

Creo que ya hay cientos de casos en México, o quizás miles, pero… tal vez me equivoque.

Muchos son asintómaticos y ni se van a enterar que tuvieron el virus, pero lo van a contagiar a quienes sí van a resentirlo.

Los epidemiólogos competentes saben que hay que aprender las lecciones de los países que tienen más enfermos y muertos: China e Italia.

Los dos gobiernos negaron la realidad. Desestimaron el riesgo y pretendieron que se podía evitar.

Cuando se dieron cuenta de que no era posible, ya era demasiado tarde. Teníamos miles y miles de casos.

Creo que por la simple observación de lo que ha pasado en el mundo, en México nos espera una grave crisis.

Pero, tal vez me equivoque.