Me han preguntado en diversas ocasiones si creo que viene para México, en los siguientes años, una nueva política energética. Mi respuesta es que sí, con independencia de quién resulte triunfadora en las elecciones del próximo 2 de junio.
Le explico las razones que me hacen pensar en que la próxima administración no podrá seguir con las actuales políticas.
1-Es obvio que si la elección fuera ganada por Xóchitl Gálvez habría un giro en la política energética para poner más énfasis en las energías renovables y menos en las energías fósiles. En ese escenario, creo que no hay duda respecto al cambio que se daría.
2-Sin embargo, aun en el escenario de que ganara Claudia Sheinbaum, habría un cambio pues su visión respecto al tema energético es diferente a la de Andrés Manuel López Obrador, aunque no sea algo que a ella le guste mencionar.
3-El 24 de agosto del año pasado, Sheinbaum se reunió con numerosos representantes del sector empresarial en el Club de Industriales. De acuerdo con los testimonios obtenidos, la entonces aún aspirante a la candidatura de Morena señaló que una de las prioridades del país deberían ser la electromovilidad y las energías limpias, y le puso énfasis a la necesaria participación del sector privado.
4- El 14 de enero de este año, Sheinbaum se reunió con empresarios en una reunión organizada por American Society of Mexico. En dicho encuentro volvió a poner énfasis en la oportunidad que representa la inversión privada, especialmente la inversión extranjera en el contexto de la relocalización industrial. Los empresarios le expresaron la relevancia de contar con energías renovables.
5-Dentro del propio gobierno de López Obrador, es bien conocido que los funcionarios del sector energético, especialmente la Secretaría de Energía, Pemex y la Comisión Federal de Electricidad, tenían otra visión que no siempre coincidía con otros integrantes del gabinete. Desde luego, AMLO les dio todo el respaldo buena parte del sexenio. Sin embargo, aun en un gobierno de la 4T, pero con otros personajes, lo más probable es que se presente un cambio.
6-El equipo de Claudia. Jorge Islas Samperio será el responsable del área de energía, en el equipo que elabora el programa de gobierno y que es coordinado por el doctor Juan Ramón de la Fuente.
Islas es físico, maestro en ingeniería y doctor en economía por la Universidad de Grenoble. Su especialidad es la transición energética.
Si la intención de Claudia fuera seguir con la lógica de Manuel Bartlett y Octavio Romero, hubiera incorporado a otro perfil a su equipo.
7-La resolución de la Corte. Con la resolución de la Segunda Sala de la Corte, queda firme la inconstitucionalidad de la Ley de la Industria Eléctrica. Con ello, se va a establecer una regla de despacho definida en términos del costo de la generación, a diferencia de la propuesta de AMLO, que privilegiaba a la CFE. Legalmente, se regresa al esquema previo a la reforma de AMLO de 2021, en el cual el factor determinante es el costo, lo que seguramente dejará fuera a múltiples centrales de la CFE.
Con esta resolución, la perspectiva es otra, y muy alentadora para la inversión privada en energía.
8- Los números. Terminaremos el sexenio con una aportación neta del gobierno federal a Pemex de alrededor de 1.5 billones de pesos. No hay finanzas públicas que aguanten esa sangría. Lo sabe Claudia y lo sabe perfectamente su equipo.
Por esas razones es que la política energética del próximo gobierno no va a ser la misma que la que se aplicó en el gobierno de AMLO. No hay manera de que el sector funcione.
La resolución de la Corte hace un par de días es apenas un primer paso. Faltan otros.
36 años
Gracias a todos los que nos han seguido en este espa-cio, Coordenadas, que el día de ayer cumplió 36 años de publicarse.