La Fiscalía General de México debe saber, porque conoce la declaración del ex director de Odebrecht en México, Luis Alberto De Meneses Wyell, que no le va a alcanzar lo que diga Emilio Lozoya en su declaración ministerial para abrir la puerta de la corrupción en campañas electorales, ni poner a la clase política en el banquillo de los acusados. Pero como ha sido el método seguido por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, la pinza para buscar los resultados esperados es la de la Secretaría de Hacienda, que de la nada, apretó al conglomerado brasileño.
Mediante un oficio fechado el 9 de julio pasado, Josué Miguel Contreras Saldívar, director general de Delitos Fiscales de la Unidad Especializada en Investigación de Delitos Financieros de la Secretaría de Hacienda, se querelló contra la Constructora Norberto Odebrecht, S.A., y su apoderado legal en México, Gleiber José de Faria, por evasión fiscal, en 2015, por más de 67 millones de pesos, al haber declarado ingresos menores a “los realmente obtenidos”.
De Faria es también su director de Finanzas y, como De Meneses Wyell, fue sancionado e inhabilitado en abril de 2018 por la Secretaría de la Función Pública, por supuestos pagos de sobornos y simulaciones, así como por incumplimientos de un contrato de casi dos mil millones de pesos. De Meneses Wyell es testigo colaborador de la Fiscalía brasileña, pero De Faria no resultó involucrado en los escándalos de corrupción en México, que fueron realizados a través de diferentes departamentos de Odebrecht, para mantener en la oscuridad de la mayoría de sus empleados.
La nueva acción emprendida contra él y la empresa por la Secretaría de Hacienda, es la primera desde 2018, hasta donde se conoce, llevada a cabo por esa dependencia o la Función Pública. En el oficio que envió Contreras Saldívar a Sergio Antonio Martínez, titular de la Unidad Especializada en Investigación de Delitos Financieros de la Secretaría de Hacienda, expone seis puntos de presunta responsabilidad de Odebrecht y De Faria:
1.- En su declaración anual del Impuesto Sobre la Renta del ejercicio fiscal “del 01 de enero de 2016 al 31 de diciembre de 2015” (como observación mía, no se explica porqué colocaron de inicio 2016 en lugar de 2015), refleja ingresos menores a los que correspondían, al manifestar tres mil 48 millones 105 mil 466 pesos, siendo que obtuvo de ingresos acumulables la cantidad de tres mil 201 millones 859 mil 109 pesos.
2.- Constructora Norberto Odebrecht, S.A., actualmente CNO, S.A., obtuvo esos ingresos acumulables con base en depósitos identificados como cobranza de Comprobantes Fiscales por internet, que expidió durante el ejercicio fiscal 2015, por concepto de prestación de servicios por trabajos de ingeniería y construcción, así como por depósitos bancarios no aclarados por la cantidad de 307 millones 727mil 945 pesos.
3.- Odebrecht manifestó en la declaración anual del ejercicio fiscal 2015, deducciones autorizadas y deducción inmediata de inversiones por dos mil 580 millones 74 mil 216 pesos, misma cantidad que registró en sus balanzas de comprobación.
4.- Para efectos de Valor Agregado, Odebrecht manifestó en sus pagos mensuales definitivos por los meses de septiembre y octubre de 2015, valor de actos o actividades en cantidad menor a la que correspondía, toda vez que obtuvo un mil 114 millones 137 mil 721 pesos, e Impuesto al Valor Agregado Trasladado por 98 millones 813 mil 750 pesos.
5.- Odebrecht manifestó en las Declaraciones Provisionales o Definitivas de Impuestos Federales de septiembre y octubre de 2015, Impuesto al Valor Agregado de esos meses por una suma de 21 millones 380 mil 741 pesos.
6.- Odebrecht omitió el pago del Impuesto al Valor Agregado por los meses de septiembre y octubre, por 21 millones 380 mil 741 pesos.
Las operaciones que investigó la Dirección de Delitos Fiscales se realizaron a través de cuatro bancos, y está concentrada en el ejercicio fiscal de 2015. Fuentes hacendarias no precisaron si se revisaron o están en proceso de revisión ejercicios fiscales adicionales. Contreras Saldívar concluyó que Odebrecht omitió el pago del IVA durante julio, septiembre y octubre de 2015, por 67 millones 506 mil 834 pesos.
No se sabe si Odebrecht ya respondió la querella, que por las fechas del oficio, se dio después de prácticamente concluidas las negociaciones del padre de Lozoya con el fiscal Alejandro Gertz Manero, aunque terminaron de afinarse los detalles 72 horas antes de que regresara Lozoya a México, en donde se determinó, por ejemplo, que no llegaría al Hospital Militar, sino a uno privado. La documentación que envió el ex director de Pemex a través de su padre incluyen los casos de Agronitrogenados –citado en la solicitud de extradición– y Fertinal –excluido en la solicitud–, además de Odebrecht.
Se ignoran los detalles que incluyó Lozoya sobre la empresa brasileña, a cuyos directivos ayudó desde 2009 para lograr negocios en México y formar sociedades con empresarios nacionales, por lo cual De Meneses Wyell le pagó poco más de 10 millones de dólares en sobornos. Pero de acuerdo a la forma como se refiere el presidente Andrés Manuel López Obrador a la corrupción realizada por Odebrecht en México, está convencido que ahí hay una mina de oro.
Sin embargo, con lo que aportaron los brasileños no alcanza a satisfacer las expectativas creadas, y de ahí, se puede colegir, las nuevas presiones a la empresa, que no dejó de operar pese a los escándalos, aunque en algunos países como México, no lograron nuevos contratos públicos. El año pasado, en la secuela del escándalo de corrupción más grande de la historia, como se describió en esta columna, en diciembre de 2016, Odebrecht se declaró en bancarrota para poder renegociar alrededor de 13 mil millones de dólares de su deuda.