La Fiscalía General de la República (FGR) anunció este martes que investigará la posible manipulación de evidencias por parte de la Fiscalía del estado de Jalisco, luego de que se detectaran inconsistencias en el manejo de pruebas relacionadas con el rancho Izaguirre, ubicado en el municipio de Teuchitlán.
El fiscal general Alejandro Gertz Manero denunció que bolsas con ropa localizadas por madres buscadoras en marzo de 2025 no se encontraban en el sitio cuando la FGR inspeccionó el inmueble por primera vez en 2024.
Dichas bolsas, aseguró, fueron recogidas por autoridades estatales sin ser periciadas adecuadamente y devueltas recientemente a la FGR, lo que podría indicar una grave alteración de la cadena de custodia.
“Son fotos que ya están ante los jueces, son pruebas que ya están judicializadas, no están puestas en duda. ¿Qué sí había? En otra parte sí había bolsas con ropa, y esas bolsas las levantó la autoridad del estado y se las llevó, y sin haberlas periciado individualmente, nos las acaba de devolver, lo cual es muy grave”, declaró Gertz.
Durante la conferencia, el fiscal mostró imágenes tomadas que documentan la existencia de bolsas negras con ropa en el rancho, las cuales no figuraban en el reporte oficial del hallazgo fechado el 19 de septiembre de 2024. Según explicó, las prendas están siendo analizadas actualmente por peritos federales y serán puestas a disposición de familiares de personas desaparecidas para facilitar su identificación.
El fiscal subrayó que ya hay 14 personas procesadas y se emitirán nuevas órdenes de aprehensión contra funcionarios involucrados, conforme se confirmen responsabilidades. Parte de las investigaciones también se centran en los elementos de las policías municipales de Teuchitlán y Tala, y en la posible protección institucional al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Además, Gertz recordó que desde 2021 la Comisión de Derechos Humanos de Jalisco había alertado a autoridades estatales sobre lo que ocurría en el rancho Izaguirre, sin que estas actuaran. Esta omisión, sumada al retiro irregular de evidencias, refuerza las sospechas de encubrimiento o rapiña institucional.
La FGR también investiga los fragmentos óseos presuntamente humanos que fueron localizados en una vasija dentro del inmueble, como parte del proceso para esclarecer plenamente los hechos y brindar justicia a las víctimas.
“Este caso no se va a cerrar mientras haya evidencia de manipulación o encubrimiento”, concluyó el fiscal.