Aristóteles Sandoval, exgobernador de Jalisco, quien fue asesinado en diciembre de 2020, intercedió ante el expresidente Enrique Peña Nieto en favor de Rafael Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara, para que fuera liberado en 2013.
Lo anterioir fue revelado por Elizabeth Castro Cárdenas, directora operativa de la Industria Jalisciense de Rehabilitación Social, en entrevista para Milenio.
De acuerdo con las declaraciones de la funcionaria, Caro Quintero fue puesto en libertad del penal de Jalisco en el que se encontraba preso, seis meses después de las gestiones de Sandoval Díaz.
Asimismo, Castro Cárdenas indicó que el también conocido como "El Principe", quien se encontraba preso desde 1985, por el asesinato del agente de la Administración para el Contro de Drogas (DEA, por sus sigla en inglés), Enrique “Kiki” Camarena, envió una carta al gobernador, que ella misma le entregó, con el fin de que la entregara a su vez al entonces presidente Enrique Peña Nieto.
La funcionaria confirmó que la misiva escrita por Caro Quintero fue entregada a Peña Nieto, como el mismo Sandoval Díaz le aseguró 15 días después de haberla recibido.
“Señor presidente de la República, Enrique Peña Nieto: Yo, Rafael Caro Quintero, llevo 28 años y no recuerdo cuántos días y meses privado de mi libertad por estos delitos, los cuales ya pagué. Le pido que me dé mí libertad...Ya pagué lo que me están diciendo que le debo a la justicia y ahora le toca a la justicia hacerme justicia y le pido que me apoye mi liberación (sic), porque es más lo que se dice de mí que la realidad”, decía la carta.
La funcionaria, que en ese entonces fungía como directora del Instituto Jalisciense de Rehabilitación Social, recordó que Caro Quintero lloró cuando le informó que la carta había llegado al expresidente Peña Nieto.
