Habría más de 43 desaparecidos y otras revelaciones sobre el caso Ayotzinapa

Tras la desaparición de los normalistas, en 2014, los ciudadanos salieron a la calle a exigir su aparición
Tras la desaparición de los normalistas, en 2014, los ciudadanos salieron a la calle a exigir su aparición
Ayotzinapa.Tras la desaparición de los normalistas, en 2014, los ciudadanos salieron a la calle a exigir su aparición
Cuartoscuro
Nación321
2018-04-12 |13:10 Hrs.Actualización13:16 Hrs.
CREEMOS QUE IMPORTA POR...

Porque a cuatro años del lamentable hecho, aún no se sabe nada de los normalistas... ni del resto de las víctimas

El 26 de septiembre de 2014, durante la llamada 'noche de Iguala', habrían desaparecido entre 50 y 60 personas y no solamente los 43 normalistas de Ayotzinapa, según revelan mensajes de texto entre jefes y sicarios de la banda Guerreros Unidos, de acuerdo con información el diario Reforma

Además, revela el medio, las instrucciones a los hombres que participaron en la desaparición de los normalistas y demás personas fueron giradas por los jefes del grupo criminal desde Chicago, Estados Unidos

Con base en caso número 1:14-cr-0075 de la Corte de Illinois, Estados Unidos, citada por el diario, las órdenes se dieron por medio de mensajes de texto desde móviles Blackberry que fueron interceptados por autoridades estadounidenses bajo una orden judicial. 

En los textos enviados entre integrantes de Guerreros Unidos entre el 27 de septiembre y el 24 de octubre de 2014, a los cuales Reforma tuvo acceso, los líderes criminales ordenan al grupo asentado en Guerrero que pidan ayuda a las propias autoridades locales para atacar a sus contrarios: Los Rojos

Los mensajes entre los Guerreros Unidos dejan al descubierto la coalición entre autoridades y el grupo criminal, pues los líderes piden a los sicarios solicitar ayuda a los policías municipales de Iguala, Huitzuco y Cocula, así como la del entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca (actualmente preso) e incluso al procurador estatal Iñaki Blanco. 

(María de los Ángeles Pineda y José Luis Abarca, entonces alcalde de Iguala. Foto: Cuartoscuro).

Asimismo, con base en los mensajes entre los criminales, la retención y desaparición de los normalistas fue una confusión, pues el ataque iba dirigido a "los contras". 

Incluso, uno de los líderes de Guerreros Unidos, identificado como Pablo Vega, se refiere a la confusión como: "es una pendejada, eso nos va a costar el negocio".