"Iba a reunión con el gobernador de Sinaloa", dice 'Mayo' Zambada en declaración

Dijo que fue emboscado, atado y llevado a la fuerza a EU
Dijo que fue emboscado, atado y llevado a la fuerza a EU
'Mayo' Zambada.Dijo que fue emboscado, atado y llevado a la fuerza a EU
Especial
Nación321
2024-08-10 |10:52 Hrs.Actualización10:50 Hrs.

Ismael 'El Mayo' Zamabada dio su primera declaración desde que fue detenido en un aeropuerto privado de El Paso, Texas, y aseguró que fue llevado con engaños, pues Joaquín Guzmán López le dijo que fueran a una reunión con el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya y con Héctor Melesio Cuen Ojeda, exalcalde de Culiacán y exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), pero fue emboscado, atado y llevado a la fuerza a Estados Unidos. 

De acuerdo con el periodista de Los Angeles Times, Keegan Hamilton, Zambada García hizo la declaración a través de su abogado, y señaló que ha habido "muchos informes inexactos" en medios de comunicación desde que fue llevado de México a Estados Unidos.

"En esta declaración proporcionaré los hechos verdaderos de lo que sucedió ese día. Deseo decir desde el principio que no me entregué y que no vine voluntariamente a Estados Unidos", aseguró 'El Mayo'.

En la misiva, el capo aseguró que fue invitado a la reunión por Joaquín Guzmán López “para ayudar a resolver las diferencias entre los líderes políticos de nuestro estado”. Se asegura que existía una disputa entre el gobernador y Cuen Ojeda por quién dirigiría la UAS.

Mencionó que la reunión se llevaría a cabo en el rancho y centro de eventos Huertos del Pedregal, ubicado a las afueras de Culiacán. Describe que en el lugar había hombres armados vestidos de verde y que “El Mayo” era acompañado por cuatro integrantes de su cuerpo de seguridad.

Detalló que, tras haber visto en el sitio a Héctor Melesio Cuen Ojeda, entró acompañado de José Rosario Heras López, comandante de la Policía Judicial del Estado de Sinaloa, y por Rodolfo Chaidez, miembro del equipo de seguridad del capo mexicano.

“Vi a Joaquín Guzmán López, a quien conozco desde que era un niño, y me hizo un gesto para que le siguiera. Confiado en la naturaleza de la reunión y en las personas implicadas, le seguí sin dudarlo. Me condujeron a otra sala que estaba a oscuras”, narra la carta.

“En cuanto puse un pie dentro de aquella habitación, me tendieron una emboscada. Un grupo de hombres me asaltó, me tiró al suelo y me colocó una capucha de color oscuro en la cabeza. Me ataron y esposaron, y luego me obligaron a meterme en la caja de una camioneta. Durante todo este calvario, me sometieron a malos tratos físicos, que me causaron lesiones importantes en la espalda, la rodilla y las muñecas. Después me llevaron a una pista de aterrizaje a unos 20 o 25 minutos de distancia, donde me obligaron a subir a un avión privado. Joaquín me quitó la capucha de la cabeza y me ató con bridas al asiento. En el avión no había nadie más que Joaquín, el piloto y yo.”

“El vuelo duró entre 2 y media y 3 horas, sin escalas, hasta que llegamos a El Paso, Texas. Fue allí, en la pista, donde los agentes federales estadounidenses me detuvieron. La idea de que me entregué o cooperé voluntariamente es completa e inequívocamente falsa. Me trajeron a este país por la fuerza y bajo coacción, sin mi consentimiento y contra mi voluntad”, agrega la narración atribuida a “El Mayo” Zambada.