La actriz y vedette Sasha Montenegro, icono del cine mexicano de los setenta, murió a los 78 años. Además de que fue famosa por sus películas, también estuvo en medio de la polémica por su romance con el expresidente José López Portillo.
Pero ¿cómo fue la historia de amor entre la actriz y el exmandatario mexicano? Aquí te lo contamos.
Todo comenzó en 1984, cuando Aleksandra Aćimović Popović (su nombre real) se encontraba de gira en España tras montar la comedia musical ‘Nunca en domingo’, justo ahí conoció a López Portillo, quien en palabras de Montenegro "era un hombre impactante y tenía personalidad".
“Paramos en Semana Santa y decidí irme a Sevilla. De pronto oigo que me dicen ‘Sasha’ y volteo y lo veo al señor” contó la actriz en una entrevista con Gustavo Adolfo Infante, para Imagen Televisión.
Después, coincidieron nuevamente en Roma (Italia) cuando el expresidente estaba casado con Carmen Romano Nolk, con quien tuvo tres hijos.
En ese entonces, López Portillo ya había dejado de ser Presidente dos años antes y tenía 62 años, mientras que Sasha 38. La diferencia de edad entre ambos era de 24 años, pero eso no impidió que comenzaran un romance.
La actriz declaró que disfrutaba de las pláticas que sostenía con el exmandatario por el nivel cultural que él tenía.
En 1985, Sasha se embarazó, según aceptó, "por accidente" de su primogénita Nabila y fue en ese momento donde comenzó la polémica, pues él aún no se había divorciado, pero su romance ya se había hecho público.
Tuvieron una separación provocada por la controversia, pero regresaron y poco después nació Alexander, en 1990.
López Portillo se divorció de Carmen Romano en 1991 y meses después se casó por lo civil con Sasha Montenegro.
Pero fue hasta 1995 lograron consumar su matrimonio por la iglesia. Un momento que la actriz recordó como uno de los más emotivos de su vida, pero esa felicidad duró poco, pues el mismo año el también abogado sufrió un infarto cerebral que lo dejó muy debilitado y que propició los rumores de que Montenegro lo maltrataba.
Fue tal la presión social y familiar que se interpuso un juicio de divorcio contra ella que se creía que no había terminado cuando el priista falleció en febrero del 2004, dejando a Sasha como su viuda, pero años después ella aclaró que la realidad fue que ganó el juicio y los magistrados federales no la divorciaron".
