Luego del problema que se generó en las puertas del Estado Azteca previo al concierto de Bad Bunny, que dejó a cientos de fans afuera, la administración del estadio emitió un comunicado donde reconoció que varios accesos fueron cerrados por cuestiones de seguridad y además se deslindó del asunto.
El Estadio Azteca argumentó su decisión de cerrar varios accesos fue cuando TicketMaster detectó casos de duplicación de boletos, pero que esa situación era ajena a ellos.
“Para garantizar la seguridad de todos los asistentes al concierto de Bad Bunny, se cancelaron dichos accesos y se extremaron todas las medidas con apoyo de personal de seguridad privado de la SSPC”, escribieron.
PROFECO LLAMA A DENUNCIAR
Por su parte, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en sus redes sociales, invitó a los afectados a denunciar abusos e incumplimientos de términos y condiciones.
El escándalo inició cuando miles de fanáticos que esperaron por meses para presenciar el concierto de Bad Bunny, el cantante del momento, reportan que no podían acceder al Estadio Azteca, ya que muchos de los boletos supuestamente son clonados y no pasan los filtros de seguridad.
A través de redes sociales, los seguidores del puertorriqueño denunciaron que los guardias de seguridad del recinto cerraron los accesos ante las irregularidades de algunos boletos.
Otros usuarios acusaron que los trabajadores del Coloso de Santa Úrsula “están robando boletos”, aprovechándose de la situación sobre la supuesta clonación de entradas.
