¡Parece broma pero es anécdota!
Nos remontamos al 2013. En ese año murió el expresidente de Sudáfrica Nelson Mandela, el papa Francisco llegaba al Vaticano como el primer pontífice latino y el espía Edward Snowden revelaba espionaje mundial.
Pero no fue todo lo que pasó. En el plano de los espectáculos ocurrió un hecho poco común para la dimensión de las bandas inmiscuidas en un hecho que pasó a la historia como una anécdota más.
Anthony Kiedis, vocalista y líder de la banda Red Hot Chili Peppers, intentó acercarse a hotel Four Seasons de Filadelfia, Estados Unidos, en el que se hospedaba la legendaria banda británica The Rolling Stones.
Hasta este punto todo parece 'normal', pero con lo que no contaba el cantante es con que un guardia de seguridad de los Stones no lo reconocería pese a su fama mundial.
Entonces le impidió el paso al inmueble y posteriormente lo golpeó. Los paparazzis alrededor le gritaban al guardaespaldas a qué figura pública estaba golpeando pero... el encontronazo ya llevaba camino andado.
Luego de momentos de drama, los jaloneos cesaron y finalmente el guardia 'entró en razón' y terminó ofreciendo una disculpa a uno de los rockstar más influyentes del orbe.