¡La fiesta brava, está de fiesta!
Este 5 de febrero se celebran 78 años desde la inauguración de la Plaza México, el sitio que alberga uno de los eventos más llamativos de la capital: las corridas de toros. En ese sentido, es interesante conocer quién introdujo la tauromaquia en México, además de la historia del también conocido Coso de los Insurgentes.
¿Cuál fue la primera plaza de toros en México?
La inauguración de “La Monumental” data del año 1946; siendo el resultado del empresario yucateco Neguib Simón Jalife, quien a finales de los años 20, afirmó que hacía falta un foro a su altura para actividades recreativas. Consiguió la ubicación de los terrenos pertenecientes a la hacienda San José, donde planeó construir una ciudad de los deportes, que incluiría una gran plaza de toros.
Fue el 3 de febrero del mismo año cuando el arzobispo de México, Luis María Martínez, dio su bendición a la plaza y al ruedo en la víspera de la inauguración. Y tan solo dos días después se celebró la primera corrida ante un sitio totalmente lleno, en la que alternaron Luis el Soldado Castro, Manuel Rodríguez, Manolete, y Luis Procuna, y se lidiaron seis toros de San Mateo.
La primera plaza de toros de la que se tiene registro era la ubicada entre la calle de Las Esterillas, Empedradillo y Seminario y ocupaba buena parte del espacio donde se encuentra la Catedral actualmente. Cabe destacar que antes de esta, se levantaban, de forma provisional, circos de carpintería en distintos lugares que se desmantelaban cuando terminaba la función.
¿Quién introdujo la tauromaquia en México?
El primer registro de una corrida de toros data del 24 de junio de 1526, época del virreinato, como una reverencia para Hernán Cortés. Según el historiador taurino José Francisco Coello Ugalde, la celebración se llevó a cabo en la Plaza del Marqués y se utilizó ganado de una casta criolla, pero útil para lo que se quería en ese momento.
No fue hasta el 13 de agosto de 1529 cuando se oficializaron las corridas de toros para conmemorar el Aniversario de la Gran Tenochtitlán y estas se llevaban a cabo en la plazuela llamada Del Marqués, que era parte del terreno que actualmente ocupa la Catedral de la capital.
Sin duda, una de las curiosidades más relevantes, es que el cura Miguel Hidalgo y Costilla era fanático de este espectáculo; fue dueño de varias haciendas y criaderos en Guanajuato, por lo que según varios libros y documentos de la época se llevaron a cabo varias corridas de toros en el marco de la Guerra de Independencia.
¿Desde cuándo se cancelan las corridas de toros en México?
A pesar del debate que existe actualmente frente a esta celebración, no es la primera vez que la fiesta brava se busca prohibir, pues de acuerdo con el historiador, entre los años 1867 y 1920, las corridas de toros fueron canceladas y prohibidas en México.
Presidentes como Benito Juárez y Venustiano Carranza lo hicieron, el primero en noviembre de 1867, mientras que el segundo en 1916 publicó un decreto el cual duró hasta 1920. Sin embargo, las fiestas se realizaban de manera clandestina y las y los aficionados se manifestaban cada domingo en la casa de Carranza.
