El presidente Andrés Manuel López Obrador evitó entrar en "controversia" con la Iglesia Católica tras las declaraciones de la Conferencia del Episcopado Mexicano sobre un posible riesgo de "retroceso democrático" en el país por la presunta intromisión del crimen organizado en las elecciones del próximo 2 de junio.
En conferencia mañanera, López Obrador sostuvo que en México se prioriza la democracia, pero señaló que respeta el punto de vista de la cúpula católica en el país, pues todos tienen derecho a manifestarse libremente.
“Estoy de acuerdo en que por el bien de todos, primero la democracia... la democracia es el pueblo. No estoy de acuerdo con que vaya a haber retroceso democrático, respeto ese punto de vista y tienen todo el derecho de manifestarse”, dijo.
A través de un comunicado, los integrantes de la Iglesia Católica mexicana señalaron lo grave que sería pactar con el crimen organizado y grupos delincuenciales para aparentemente celebrar unas elecciones en paz.
“Las condiciones por las que atraviesa el país desafortunadamente no son las mejores, pues es evidente que, desde hace tiempo, nuestros problemas son muchos en materia de seguridad, desigualdad social, crecimiento económico, insuficiente empleo formal y digno, cobertura y calidad educativa y de salud, migración, polarización social, y otros problemas”, se lee en el comunicado.