Pese a que asegura no haber abusado sexualmente de dos menores, el diputado Saúl Huerta todavía no declara ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México para defenderse por la vía legal de las acusaciones.
Por ende, hasta el momento carecen de “validez jurídica” sus argumentos de que es víctima de una trampa de “la mafia del poder” para perjudicarlos a él y a la Cuarta Transformación.
Así lo señalaron personas allegadas a la carpeta de investigación y a la asesoría jurídica de uno de los adolescentes afectados, quienes confirmaron que el legislador no ha acudido al Ministerio Público para presentar datos de prueba de su presunta inocencia de los cargos de violación agravada y abuso sexual.
Agregaron que hasta el momento su defensa sólo es mediática y no se ha iniciado formalmente por la vía jurídica ante la Fiscalía capitalina.
El 21 de abril pasado, cuando Huerta fue detenido tras ser acusado de abusar sexualmente de un chico de 15 años que trajo desde Puebla “para conocer el trabajo legislativo”, el diputado se amparó en su fuero para reservarse el derecho a declarar ante el Ministerio Público.
Esto obligó a dejarlo en libertad, pero ante el cúmulo de pruebas que logró reunir la dependencia encabezada por la fiscala Ernestina Godoy, el organismo solicitó a la Cámara de Diputados juicio de procedencia para retirarle la inmunidad.
Huerta reapareció este jueves en una entrevista con Grupo Fórmula, en la que acusó de “tener fama de extorsionadores” a miembros de la familia del adolescente que lo acusó por lo ocurrido en un hotel en la Colonia Juárez, en la Ciudad de México.
El político apuntó que la “mafia del poder” le tendió una celada y negó haber atacado sexualmente al menor denunciante, de quien dijo que no presenta el comportamiento de una víctima.