Hoy comienzan los 30 días más intensos de este proceso electoral. Si usted ya está aburrido de ver en TV y de escuchar en radio spots de todo tipo (ninguno propositivo), si su hígado ya está picado y se ha peleado con más de un par de amigos en una infértil y apasionada discusión política, le tengo malas noticias: el panorama no pinta para mejor.
Pero más allá de las discusiones sobre el voto útil, sobre si los empresarios están “aconsejando” a sus empleados sobre quién votar, y de defensores a ultranza de coaliciones inexplicables y presidenciables, ¿ya se dio cuenta que el 1 de julio recibirá (dependiendo el estado en que viva) entre 5 y 6 boletas electorales? Estoy cierto de que conoce a los 4 presidenciables, pero ¿sabe a qué diputado va a dar su voto? ¿Conoce las opciones de quienes se postulan por el Senado? ¿Vive en un estado donde se renovarán presidencias municipales o Congreso local? Quizá sea un buen momento de pensar que además de un presidente de la República y un gobernador o jefe de Gobierno, más de 3 mil puestos estarán en sus manos y podrían convertirse en el contrapeso en caso de que la elección favorezca al candidato que menos quiera.
Ojo: no se trata nada más de poner con una cruz al partido al que usted sea fiel (¿aún hay quienes votan por partido sin fijarse en el candidato? ¿En serio?). Si es usted Amlover de corazón, no se conforme con ello para marcar una cruz por Morena, lea perfiles, busque si los aspirantes han tenido debates, si han acudido, si han ocupado otros cargos y cómo se desempeñaron. No le baste con ser ese escueto 20 por ciento que aún se sostiene del lado de la actual administración y que votará por el PRI, indague sobre la clase política que está dispuesta a mantener en el poder, verifique si no hay casos, como en CDMX, donde las opciones tricolores parecen sostener un discurso de odio y no de progreso. O si hay casos como las opciones del Senado en el Edomex, que mantendrán con poder a los mismos.
¿Cree en esa tan mentada ilusión de ir “de Frente hacia el futuro”? Ok, pero no por ello le regale su preferencia a todo lo que le suene amarillo, naranja o blanquiazul. Ni se vaya con la finta de que contender sin partido significa independencia. Lea, pregunte, mándeles un tuit y exija respuestas.
A partir de hoy tiene 30 días para hacerse responsable de su voto. No sólo nos van a gobernar los mandatarios estatales y el presidente, no depende de ellos nada más presupuestos, obra pública, cambios en las leyes locales que parecen inofensivos y en donde se termina favoreciendo a la corrupción. ¿O cree que en serio un Duarte, un Borge, un (ponga el apellido de su localidad) ha desfalcado solo?
Desde hoy está mucho en manos de usted averiguar la línea política de aquellos que pretenden ocupar puestos de elección popular y también en los plurinominales. ¿Si sabe que esa lista plurinominal dependerá en gran medida del número de votos que obtenga un partido, verdad? ¿Sabe también que el próximo financiamiento público de esos partidos políticos que tanto denuesta también se relacionan con si se votó o no carro completo de un PRI, PAN, Morena, PRD, PVEM, PT, PES o Humanista?
Nueve estados renovarán su Congreso. En algunos casos, como el Edomex, tiene la oportunidad de verificar lo que en un año ha hecho el ¿reciente? y polémico gobernador Del Mazo. ¿Merece repetir voto el partido o nos animamos a darle un contrapeso político real en el Poder Legislativo? ¿En Puebla? ¿Qué han hecho sus autoridades con la creciente violencia? ¿O en Jalisco? ¿Sabe que el perredista que gobierna en Tabasco tiene un hijo morenista que busca ser alcalde en CDMX? ¿O que más de 20 alcaldes del Estado de México quieren ser reelectos? ¿Sabe que en CDMX los nuevos diputados locales tendrán como responsabilidad generar más de 50 leyes secundarias para la entrada en vigor, en septiembre, de la primera Constitución?
Si todos estos temas son algo que no se ha tocado en sus acaloradas discusiones políticas, le tengo noticias: no, usted aún no está preparado para el día del voto. Pero aún tiene 30 días.