Porque a veces los problemas se manifiestan de maneras muy extrañas... y es viernes
No es broma, esta semana el mundo de las noticias presentó dos notas curiosas protagonizadas por una paloma y un jabalí.
Estas son las historias:
'NARCOPALOMA'
Antes de que empieces a leer esta nota, te decimos que no se trata de una una nueva manera de transportar estupefacientes por parte de los grupos criminales en México.
Esta semana, agentes aduaneros de Kuwait lograron la captura de una paloma 'mensajera' que volaba cerca de la frontera con Iraq con un cargamento de drogas que traía en una pequeña mochila ubicada entre sus alas.
De acuerdo con el canal local de noticias, Al Arabiya, el ave tenía un cargamento de 178 píldoras de Ketamina, un analgésico de uso veterinario que se vende como droga en el mercado negro de esa región, es decir, traficaba drogas para el beneficio de los humanos... no para otras palomas.
Shocking images: Traffickers use pigeon to smuggle drugs into #Kuwait https://t.co/yl1Ri2xVHk pic.twitter.com/oFGWwX07N5
— Al Arabiya English (@AlArabiya_Eng) 23 de mayo de 2017
EL TERROR DEL JABALÍ
El gobierno de Texas en Estados Unidos está a nada de aprobar una legislación que permite la cacería de jabalíes desde globos aerostáticos, sí... como lo leíste.
De ser firmada por el gobernador de esa entidad, el conservador Greg Abbott, la propuesta de ley HB 3535 autorizaría a los residentes de Texas que tengan licencia de cazador el matar esta especie por los cielos.
En realidad ya cazaban a este animal desde los cielos utilizando un helicóptero, sin embargo el jabalí no les hacía fácil la tarea, pues el ruido de las hélices provocaba que se asustaran con facilidad y emprendieran la huida. ¿Cuál es solución? Duh, usemos un globo aeroestático.
El jabalí es una especie que se le cataloga como un "peligro" agrícola tanto en el norte de México y en el sur de Estados Unidos, porque sus manadas suelen destruir los cultivos, el nacimiento de sus crías está fuera de control y el consumo humano de su carne no es recomendable por autoridades de salubridad.
Los estadounidenses han intentado de todo para terminar con esta plaga, como controles de natalidad de la especie por ejemplo, pero los texanos prefieren culminar con este "terror" por medio de la cacería, la cual es completamente legal en esa entidad.
