Mal diagnóstico: A Rebecca Jones le dijeron que su cáncer era colitis

La actriz, que murió a los 65 años, lidió contra un cáncer en el ovario que la obligó a un tratamiento de quimioterapias
La actriz, que murió a los 65 años, lidió contra un cáncer en el ovario que la obligó a un tratamiento de quimioterapias
Q.E.P.D.La actriz, que murió a los 65 años, lidió contra un cáncer en el ovario que la obligó a un tratamiento de quimioterapias
Especial
EF
2023-03-22 |13:03 Hrs.Actualización13:02 Hrs.


Rebecca Jones comenzó a experimentar dolor e inflamación en el estómago, por lo que acudió a un médico familiar quien le aseguró que sufría de colitis nerviosa y le recetó un medicamento, pero la actriz empeoraba en sus síntomas antes de saber que un mal diagnóstico había impedido la detección temprana de un cáncer de ovarios.

“Fui al doctor por primera vez porque me estaba molestando la panza, de inflamación; me dijo que era colitis nerviosa porque mi mamá se había muerto recientemente”, dijo en el programa El minuto que cambió mi destino.

Luego de ser ingresada al hospital, en noviembre pasado por una neumonía, deficiencia pulmonar y una bacteria, quien dio vida a una villana en la telenovela Cuna de Lobos se estaba recuperando, pero murió la madrugada de este 22 de marzo. Su enfermedad ya estaba en etapa 3B cuando se enteró en 2017 que el cáncer era la causa de sus molestias luego de realizarse una colonoscopía.

Cinco veces fui al médico y siguió dándome medicamento para la colitis”, expresó a Ventaneando. Pero fue al volver de una gira que se decidió a hacer algo más luego de que no viera mejoría pasados ya 3 meses.

“Fue por otros estudios que se dieron cuenta que tenía una ascitis, así se llama. Es un líquido epitelial que se forma en toda el área estomacal (…) Tenía un cáncer que no tenía nada de benigno y que teníamos que atacarlo de inmediatamente”, añadió.

REBECCA JONES PERDONÓ SU MAL DIAGNÓSTICO

La primera actriz confesó que cuando escuchó la palabra tumor pensó en la muerte y que no sintió miedo sino paz porque si llegaba a morir sería satisfecha de la vida que tuvo. Después de someterse a un tratamiento de ocho quimioterapias y una operación, anunció que estaba a salvo.

Durante una plática de prevención en la Legislatura del Congreso de la Ciudad de México, habló de la importancia de pedir segundas opiniones y escuchar a tu cuerpo para que no se repita su historia “con un doctor que me conocía de toda la vida, un médico militar” de quien no dijo su nombre porque “ya lo perdoné”, aseguró.