Samuel García, gobernador de Nuevo León, atribuyó las desapariciones de mujeres en la entidad a problemas psicosociales derivados de la pandemia de COVID-19.
”Es un problema que se agravó con el COVID, con problemas de salud mental, de encierro, de machismo, drogas, desigualdad y de falta de oportunidades”, afirmó.
Cifras de la Comisión Estatal de Búsqueda refieren que del 1 de enero al 17 de abril de este año, 327 mujeres fueron reportadas como desaparecidas; 294 fueron localizadas con vida y cinco sin vida.
García aseguro que todo el estado está volcado en la búsqueda de las personas desaparecidas y que incluso, en las últimas horas, siete mujeres más fueron localizadas.
“Voy a ser muy claro: a los violadores, feminicidas y a todos aquellos que les hagan daño a las mujeres de Nuevo León, sepan que los vamos a encontrar y a castigar con todo el peso de la ley”, afirmó.
El gobierno neolonés anunció un incremento de 50 millones de pesos en la partida presupuestal de la Comisión Estatal de Búsqueda, la implementación del Código Alba en la entidad y un aumento de agentes para las labores de búsqueda y localización.
García dijo que se creará un centro de mando en el que participen tanto autoridades del C-5; de la Comisión Estatal de Búsqueda; Comisión Estatal de Víctimas; el Grupo Especial de Fuerza Civil, y la Fiscalía General del Estado, que revisará caso por caso con el objetivo de ser efectivo en la localización y abrir carpetas de investigación.
“Hay muchas leyes que hay que modificar, hay otras que tenemos que crear, por eso se va a invitar al Congreso. Hay muchas acciones que tienen que hacer los alcaldes porque ellos son los de proximidad, los que deben de llegar en menos de 24 horas, de hecho la primera hora vale oro y para eso existe la policía de primer piso”, expuso.
El gobernador también anunció que se entabló diálogo con estados vecinos como Tamaulipas, Coahuila y San Luis Potosí a fin de celebrar convenios en esta materia de búsqueda de personas.
