Porque las órdenes de Trump están creando descontento a nivel internacional
La suspensión por parte de un juez federal del decreto migratorio de Donald Trump, que prohíbe la entrada a Estados Unidos de ciudadanos de siete países musulmanes, es el nuevo episodio de una batalla jurídico-política que recién empieza.
A continuación, algunos datos que ayudarán a entender lo que sucede.
¿QUÉ PASÓ?
El juez federal de Seattle, James Robart, ordenó suspender temporalmente la ejecución del decreto de Trump, en vigencia desde el 27 de enero, que prohíbe la entrada a Estados Unidos de los ciudadanos de Irán, Irak, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen durante 90 días.
La orden de Robart es aplicable al conjunto del territorio estadounidense mientras examina una demanda interpuesta por el fiscal general del estado de Washington, Bob Ferguson.
Las otras dos medidas de Trump (el bloqueo del programa de acogida de refugiados durante 120 días y la prohibición indefinida de entrada en el caso de los sirios) también fueron suspendidas por el juez.
Jueces federales de varios estados se pronunciaron en contra del decreto de Trump, especialmente en California y Nueva York, pero la decisión del juez Robart fue la de mayor alcance.
Trump atacó el fallo de Robart en una serie de tuits posteados el sábado.
Because the ban was lifted by a judge, many very bad and dangerous people may be pouring into our country. A terrible decision
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 4 de febrero de 2017What is our country coming to when a judge can halt a Homeland Security travel ban and anyone, even with bad intentions, can come into U.S.?
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 4 de febrero de 2017
LA APELACIÓN
El Departamento de Justicia de Estados Unidos apeló la decisión del juez Robart; sin embargo, la corte de apelación infligió un nuevo revés a la administración Trump, al rechazar restablecer la aplicación del decreto migratorio.
"La solicitud de los demandantes para una suspensión administrativa inmediata, a la espera de una total consideración de la moción de emergencia para una suspensión que está pendiente de apelación, está negada", dice el dictamen emitido por la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito.
Por lo tanto, se mantiene suspendida la aplicación del decreto antiinmigración de Trump.
En la decisión judicial se solicita además a los estados de Washington y Minnesota que interpusieron la demanda contra el decreto de Trump, que suministren documentación en la que se detalle su oposición al recurso gubernamental antes de este lunes 6 de febrero.
Al respecto, el vicepresidente Mike Pence, aseguró que seguirán dando la batalla legal para que el decreto migratorio vuelva a ser puesto en marcha.
"Vamos a ganar esta batalla, seguiremos usando los medios legales a nuestra disposición para suspender esa orden y dar los pasos necesarios para proteger a nuestro país", dijo durante una entrevista para Fox News.
Más tarde, Trump arremetió nuevamente en su cuenta de Twitter y aseguró que si algo malo pasa en Estados Unidos, el culpable será el juez que revocó su orden ejecutiva.
Just cannot believe a judge would put our country in such peril. If something happens blame him and court system. People pouring in. Bad!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 5 de febrero de 2017
¿QUÉ PASA CON LAS VISAS?
Tras la resolución de Robart, algunas compañías aéreas volvieron a autorizar rápidamente el embarque de los pasajeros provenientes de los países afectados.
Las autoridades también suspendieron la revocación de unas 60, 000 visas.
"Los individuos que tengan visas que no fueran físicamente canceladas pueden viajar ahora si su visa es válida", indicó el Departamento de Estado.
"El personal del Departamento de Seguridad Interior reanudará la inspección de viajeros de acuerdo con la política y procedimientos estándares", añadió.
¿QUÉ SIGNIFICA EL NUEVO REVÉS PARA TRUMP?
Para muchos, la suspensión del decreto ilustra la falta de coordinación del equipo de Trump. La Casa Blanca aplicó una política voluntarista sin tener el consenso suficiente, dijo Peter Spiro, profesor de derecho en la Universidad Temple de Filadelfia, a la AFP.
Varios artículos publicados en la prensa estadounidense señalan que el jefe del Departamento de Seguridad Interior, John Kelly, se quejó de haber sido puesto al frente del decreto cuando la decisión ya había sido tomada por la Casa Blanca.
Trump cometió un error al burlarse en Twitter del juez Robart, a quien tildó de "supuesto juez, es algo que los jueces no aprecian, sea cual sea su color político", concluyó Spiro.