Reynosa, Tamaulipas, vive un momento álgido en cuanto a seguridad, pues en los últimos días se han registrado hechos violentos que han cobrado la vida de más de una docena de civiles.
¿Por qué se desató la violencia en la ciudad? ¿Qué han dicho las autoridades? ¿Qué medidas se han implementado para contener los hechos violentos? Te contamos.
¿QUÉ ESTÁ PASANDO EN REYNOSA?
Un grupo de hombres armados disparó en contra de civiles en las calles de Reynosa, Tamaulipas, dejando un saldo de 15 personas fallecidas. Sujetos a bordo de vehículos abrieron fuego en las colonias Almaguer, Lampacitos, Unidad Obrera y Bienestar cercanas al puente Pharr, vía de comercio legal e ilegal de la región y frontera con McAllen, Texas en Estados Unidos; ruta utilizada habitualmente por el crimen organizado.
A través de redes sociales, ciudadanos informaron que la reacción del Ejército y Policía Estatal fue tardío, pues se registraron entre 60 y 90 minutos de llamadas de auxilio antes de la 1 de la tarde.
“Nosotros ahorita no tenemos policía municipal porque hay mando único y es muy desesperante el que dependas totalmente de la Policía Estatal y las Fuerzas Federales”, dijo Maki Ortiz, presidenta municipal de Reynosa en entrevista para Televisa.
El mismo día, el Ejército se enfrentó contra los grupos armados donde se detuvo a Jonathan Balderas Rodríguez, quien días después declaró ante la Fiscalía General de la República que habría recibido órdenes de “calentar la plaza”. Más tarde, en otro enfrentamiento, se decomisaron armas “AR15” con las que presuntamente se habría disparado a población civil. Ahí fueron abatidos 4 agresores.
Testimonios recogidos por AP relatan que entre las personas que fallecieron había un estudiante de enfermería, así como obreros y taxistas que no estaban involucrados con el crimen organizado, lo que ha causado una indignación generalizada en las colonias afectadas del municipio.
Tras lo ocurrido, La Fiscalía General de Justicia del estado de Tamaulipas abrió una investigación, en la que las primeras pesquisas apuntan a que se trató de un acto de “desestabilización social” por parte de las células del Cártel del Golfo identificadas como “Ciclones” y “Escorpiones” en la región, que operan contra “Los Metros”, otro grupo delictivo.
De acuerdo con la Comisión de Derechos Humanos del estado, que también investiga el caso, ésta giró en torno en primera instancia, en por qué falló la coordinación de las fuerzas de seguridad y tardaron tanto para prevenir que el ataque pasara a consecuencias graves.
El lunes 21 de junio se informó de una reunión entre el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca con la Secretaría de Gobernación y de Seguridad y Protección Ciudadana, así como la atracción del caso por parte de la Fiscalía General de la República, a petición del presidente Andrés Manuel López Obrador con el objetivo de “esclarecer los hechos y castigar a los responsables”, declaró Rosa Icela Rodríguez.
No obstante, el miércoles 23 de junio se presentó un nuevo enfrentamiento entre Fuerzas Armadas y grupos delincuenciales en el que se capturó a dos pistoleros en un predio cercano al libramiento Monterrey-Matamoros.
Hasta el momento, hay cinco detenidos involucrados con el caso, que están a disposición de la Fiscalía General de la República, que continúa con la investigación.
Finalmente, ante el clima de inseguridad que ha invadido el estado, empresas manufactureras, maquiladoras y parques industriales han limitado sus horarios de trabajo por protección a sus trabajadores.
