Juan Manuel García Ortegón, director del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5), explicó este lunes sobre lo ocurrido con la alerta sísmica emitida el viernes y sábado pasados.
Sobre el temblor de 19 de marzo, cerca de mil postes reprodujeron un mensaje de simulacro cuando en realidad se estaba registrando un movimiento telúrico, y otros 400 no emitieron ninguna alarma. Respecto al sábado, el alertamiento fue falso.
Te damos los detalles en los siguientes puntos:
- En el caso del viernes, la configuración de uno de los servidores de la solución IP que se utiliza para la difusión de la alerta sísmica no fue realizada de manera correcta por parte del personal responsable. Esto causó que el audio de "simulacro" se encontrara cargado, en lugar del audio oficial de la alerta.
- Por ello, tanto a la persona encargada como a su supervisor, se les solicitó su renuncia.
- En ese servidor se alojaban mil 948 altavoces, que corresponden a 974 postes distribuidos en toda la ciudad.
- Sobre el sábado, García Ortegón detalló que fue un problema de sistema, "de un servicio que entró en falla al recibir la señal del sismo del día anterior. Eso provocó que uno de los mensajes de alertamiento sísmico quedara en suspensión".
- El servicio se recuperó durante esa jornada, por lo que la emisión de la alarma se dio por la mañana.
- La falla, indicó el titular del C5, solo afectó al modo analógico de esta red.
¿Y qué se hizo al respecto?
García Ortegón expuso que, para el problema del viernes, se hizo una revisión detallada de la configuración de todos los servidores involucrados, con audios cargados de manera correcta.
Sobre el sábado, se hizo la corrección de problema que causó la falla en los servicios de envío. Se harán simulacros con audio en blanco, es decir, la ciudadanía no podrá escucharlos; esto será del 22 al 24 de marzo.
Además, se acelerará el proceso de migración de altavoces que aún son análogos a IP.
El domingo 11 de abril se llevará a cabo una prueba de altavoces con un sonido diferente al de la alerta.
"No es un simulacro, es una prueba específica del adecuado funcionamiento de los altavoces en la vía pública", aseveró el director del C5.
Recuerda que el Sistema de Alerta Sísmica Mexicano inició en 1993, está compuesto por 97 sensores y, desde 2015, se difunde por los altavoces de la Ciudad de México.