El Comité Noruego otorgó el Premio Nobel de la Paz 2022 al activista bielorruso encarcelado Ales Bialiatski, al grupo ruso Memorial y a la organización ucraniana Center for Civil Liberties.
Berit Reiss-Andersen, presidenta del Comité Noruego del Nobel, refirió que el panel quería honrar a “tres destacados campeones de los derechos humanos, la democracia y la coexistencia pacífica”.
La decisión de otorgar el galardón a Ales Bialiatski generó polémica al tratarse de uno de los activistas más ‘incómodos’ para la administración rusa. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Bielorrusia denunció al Comité Nobel por honrar a Bialiatski, y el portavoz calificó sus elecciones en los últimos de estar “politizadas”.
Cuando se le preguntó si el Comité del Nobel estaba reprendiendo intencionalmente a Putin, cuyo cumpleaños número 70 es el viernes, Reiss-Andersen dijo que el premio no era contra nadie, sino por algo.
La líder de la oposición bielorrusa exiliada Sviatlana Tsikhanouskaya, de visita en París, dijo a The Associated Press que se sentía “honrada y encantada” de que Bialiatski estuviera entre los galardonados. “Seguro que atraerá más atención a (la) situación humanitaria en nuestro país”, dijo.
Tsikhanouskaya, cuyo esposo también está encarcelado, dijo que Bialiatski “está sufriendo mucho en las celdas de castigo” en Bielorrusia.