Seis de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos por la fuerza el 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, fueron mantenidos con vida en un almacén durante días y entregados al comandante de una base militar que ordenó su ejecución.
De acuerdo con el subsecretario de Gobernación de México, Alejandro Encinas, quien encabeza la Comisión de la Verdad para esclarecer la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, estos estudiantes fueron entregados al comandante del Batallón de Iguala, José Rodríguez, quien ordenó su muerte.
Los seis estudiantes habrían estado vivos hasta cuatro días después de los hechos y habrían sido asesinados y desaparecidos por orden del coronel, supuestamente el entonces coronel José Rodríguez Pérez”, comentó Encinas en la presentación de un informe, en Palacio Nacional, el viernes 26 de agosto.
Mencionó, además, que "hay información corroborada con llamadas telefónicas de emergencia 089 donde presuntamente seis de los 43 estudiantes desaparecidos fueron retenidos durante varios días y con vida en lo que llaman el viejo almacén y de ahí fueron entregados al coronel”.
Además, en el informe se señala que una posibilidad sobre el destino de los 43 alumnos de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, quienes permanecen desaparecidos desde el 26 y 27 de septiembre de 2014, es que hayan terminado en crematorios para incinerarlos y no en el basurero de Cocula como señala la “verdad histórica”, detalla el informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa (Covaj).
Esta hipótesis se basa en dos declaraciones, una de las cuales menciona que los estudiantes fueron llevados a la Funeraria de “El Ángel”, cuyos crematorios se encuentran en la salida a Chilpancingo y en el centro de la capital de Guerrero.
En la funeraria supuestamente habrían sido cremados a partir de las 03:00 o 04:00 horas del 27 de septiembre y terminaron la tarde del día siguiente, aunque según la citada declaración, hubo cuerpos que no fueron consumidos en su totalidad.
HABÍA UN SOLDADO INFILTRADO ENTRE LOS 43 ESTUDIANTES
Cabe recordar que la semana pasada cuando Encinas dio el informe de la Comisión de la Verdad, no mencionó al coronel, pero habló del caso de un soldado que fue infiltrado en el grupo de normalistas que también fue desaparecido.
Mencionó que las autoridades habían estado monitoreando a los estudiantes de Ayotzinapa desde el momento en que salieron de su campus hasta su secuestro por parte de la policía local en Iguala.
E incluso, detalló que un soldado que se había infiltrado en la escuela estaba entre los estudiantes secuestrados, pero el Ejército no siguió sus propios protocolos para tratar de rescatarlo.
La semana pasada, agentes federales arrestaron al ex fiscal general Jesús Murillo Karam, quien supervisó la investigación original. El miércoles 24 de agosto, un juez ordenó que fuera procesado por desaparición forzada y por no denunciar tortura y mala conducta oficial.
De acuerdo con los fiscales, Murillo Karam creó una narrativa falsa sobre lo que había ocurrido con los estudiantes de Ayotzinapa para dar una rápida resolución al caso.