Porque el ataque a esta familia es tan solo un reflejo de la inseguridad que se vive en el país
Nueve miembros de la familia LeBarón fueron asesinados a sangre fría por miembros del crimen organizado en la zona limítrofe entre Chihuahua y Sonora. Seis de las víctimas eran niños.
Las imágenes de una camioneta completamente calcinada en la cual viajaba María Ronita LeBarón con sus hijos han cimbrado al país y levantado toda una serie de reclamos en contra del gobierno federal por la estrategia de seguridad que este 4 de noviembre cobró la vida de menores en una masacre.
Desgarrador.😢
— Elisa AlanísZurutuza (@elisaalanis) November 5, 2019
La voz de un abuelo registrando la masacre de sus nietos y su madre... de la familia LeBarón.
Es el dolor. Es la locura.
Esto es lo urgente, lo importante.
Si no cambia, lo demás sale sobrando.
pic.twitter.com/h9oMOeJTQr
Te presentamos los momentos de angustia que vivió la familia LeBarón tras el ataque a su familia, de acuerdo con las publicaciones compartidos por los mismos miembros de la comunidad.
LA EMBOSCADA
El gobierno federal informó que la emboscada en contra de la familia LeBarón comenzó alrededor de las 13 horas de este lunes; sin embargo, la ayuda militar llegó cinco horas después por falta de personal, aseguró el titular de Seguridad, Alfonso Durazo.
De acuerdo con John y Kendra Miller, también parte de los LeBarón, durante 11 horas la familia no supo sobre los sobrevivientes del ataque.
"Durante 11 horas, sus familias por todo Sonora, Chihuahua, y el medio oeste de los EE. UU. esperaban con miedo y horror por cualquier noticia de posibles sobrevivientes. El primer vehículo fue encontrado lleno de agujeros de bala y completamente en llamas", se lee en una publicación.
Además, familiares de las víctimas detallaron que solo quedaron cenizas y algunos huesos que permitieron identificar a las personas que habían estado en el vehículo. "Parece que uno trató de escapar ya que la puerta del pasajero estaba abierta y los restos estaban parcialmente dentro y fuera del vehículo".
Unos 16 kilómetros adelante de la familia de María Ronita Miller viajaban Christina Langford, con su bebé Faith, y Dawna Langford con nueve menores en su vehículo.
"Christina saltó saludando a sus brazos para que los atacantes supieran que eran mujeres y niños en los vehículos. Ella dio su vida para tratar de salvar el resto. Dawna y dos de sus chicos también fueron asesinados en los disparos", narraron los familiares.
LA AYUDA
"Después de presenciar la muerte de su madre y hermanos, el hijo de Dawna, Devin (13 años), escondió a sus otros 6 hermanos en los arbustos y los cubrió con ramas para mantenerse a salvo mientras él iba por ayuda. Cuando se tomó demasiado tiempo para volver, su hermana de 9 años dejó a los cinco restantes para intentarlo de nuevo. Devin llegó a LaMora a las 5:30 pm, 6 horas después de la emboscada, dando la primera noticia".
Aunque la familia salió casi de inmediato con destino a donde había sido el ataque, tuvieron que esperar por refuerzos pues los tiroteos en las zonas aledañas a La Mora continuaban. Fue hasta alrededor de las 7:30 de la noche que los menores heridos fueron rescatados,
"Ellos encontraron al bebé de Christina con el vehículo a su alrededor plagado de agujeros de bala. De alguna manera ella se había quedado intacta, y viva. Ella estaba en el asiento de su coche, que parecía haber sido colocado rápidamente en el suelo del vehículo por su madre para su protección", dice la publicación.
En tanto, McKenzie, la niña de 9 años que había ido por ayuda, fue hallada por militares alrededor de las 9:30 de la noche.
LAS VÍCTIMAS
En total hubo nueve víctimas del crimen organizado:
Rhonita María Miller, 30 años
Howard Jacob Miller, Jr., 12 años.
Krystal Bellaine Miller, 10 años.
Titus Alvin Miller, 8 meses.
Tiana Gricel Miller, 8 meses.
Christina Marie Langford Johnson, 30 años
Dawna Ray Langford, 43 años
Trevor Harvey Langford, 11 años.
Rogan Jay Langford, 2 años.
Los menores que sobrevivieron fueron:
Feith Marie Johnson, 7 meses de edad.
Kylie Evelyn Langford, 14 años, quien tuvo un disparo en el pie.
Devin Blake Langford, 13 años, quien resultó ileso.
McKenzie Rayne Langford, 9 años, quien tuvo una herida en el brazo.
Cody Greyson Langford, 8 años, quien sufrió un de tiro en la mandíbula y otro en la pierna.
Jake Ryder Langford, 6 años, quien resultó ileso
Xander Boe Langford, 4 años, quien sufrió un tiro en la espalda.
Brixon Oliver Langford, 9 meses, quien recibió un disparo en el pecho.